lunes, 18 de enero de 2016

¿Aprenden los animales?

Muchas personas dicen que los animales no aprenden mientras que otros defendemos que sí aprenden. Desde mi punto de vista y tras haber visto la entrevista que Eduardo Punset hace a Nicholas J. Mackintosh, catedrático emérito de psicología en la Universidad de Cambridge, creo que los animales si aprenden. 
Por ejemplo, si enseñamos a un gato a hacer sus necesidades en la caja, las hará. Igual que nosotros vamos al baño. Esto es una manera de enseñar a dicho animal ya que al ver la caja de arena comprende que es ahí donde tiene que hacer sus necesidades y lo relaciona. 




Además, cuando silbamos a un perro, sabe que vamos a darle comida e instantáneamente viene corriendo a la cocina a por ella. Algo parecido nos pasa a nosotros cuando tenemos muchas ganas de hacer pis y vemos el edificio de nuestra casa. Cuando al perro se le llama sabe que es porque va a recibir comida, y es por eso por lo que empieza a salivar y va corriendo, al igual que si nosotros nos estamos haciendo pis y vemos el edificio de nuestra casa, tenemos muchas más ganas de llegar a casa porque la necesidad de hacer pis es mucho mayor. 

El ejemplo más conocido es el de la gorila, Koko, ya que ha sido capaz de aprender el lenguaje de señas americano. Además, también destaca por su capacidad de emitir sonidos vocales parecidos a los de los humanos. Por último Koko es capaz de controlar su respiración, comportamiento que no forma parte de los gorilas sino que Koko lo ha aprendido. 

jueves, 14 de enero de 2016

¡Aprender!

Si le preguntamos a un niño de 4 años que nos diga algo que ha conocido recientemente nos contestaría a su tía que vive lejos de él, a algún famoso, etc. Sin embargo, si le preguntamos que qué ha aprendido en los últimos meses nos diría que a leer. 
Dado que nosotros ya no somos niños, esta respuesta nos parecería extraña ya que para algunos de nosotros para aprender es necesario conocer antes dicho concepto/acción, etc. Pero para otros aprender puede ser memorizar para un examen y sacar una nota específica, o repetir una receta-por ejemplo, para que no sepa mal y puede que haya muchos más ejemplos parecidos.



En mi opinión, creo que todas las personas aprenden de maneras diferentes aunque semejantes entre ellas. Por ejemplo, aquellos que memorizan, lo hacen a base de repetir (como el ejemplo anterior de las recetas). Otros lo comprenden y/o lo conocen. Aunque conocer es en cierto modo aprender, no diría completamente que conocer es aprender ya que por ejemplo, yo puedo conocer a una mujer de vista, pero no comprendo su manera de actuar ante ciertas cosas. Incluso (y considero la más efectiva) conocemos gracias a la experiencia junto con su respectivo refuerzo o castigo. Con esto me refiero a cuando por ejemplo nos tropezamos porque no levantamos los pies del suelo lo suficiente. Tras haberte tropezado diez veces, entiendes porqué te tropiezas y no lo vuelves a hacer. 

Ahora bien, ¿qué son refuerzos positivos y negativos y cómo nos influyen en nuestro aprendizaje?
Dichos refuerzos son realizados principalmente por figuras significativas y van dirigidos a nosotros. Pueden ser realizados verbalmente o no-verbalmente, con gestos o expresiones. Es por esto que nuestro cuerpo muchas veces habla por nosotros mismos, ya que aparentamos que una persona nos cae bien por medio de las palabras y nuestras expresiones corporales dicen lo contrario. Los refuerzos positivos son expresiones positivas (¡Qué bien lo has hecho!) sobre la manera de actuar de una persona. Los refuerzos positivos no son elogios, por lo tanto no es decirle a la otra persona que qué guapa es. Los refuerzos negativos son expresiones negativas con el fin de que la acción a la que va dirigido el refuerzo mejore, dentro de sus posibilidades. En estos refuerzos hay que tener mucho cuidado con el verbo ser ya que por ejemplo, en el caso de que siempre nos tropecemos y nuestros padres nos digan: ¡Eres un torpe!, acabaremos pensando que lo somos, no que deberíamos tener más cuidado a la hora de andar. 

"Soy de la opinión de que cuando se trata a alguien como si fuera un idiota, es muy probable que, si no lo es, llegue muy pronto a serlo." F. Savater.

Esta cita de F. Savater nos lleva a conocer el efecto Pigmalión, que es el proceso mediante el cual las expectativas de una persona respecto a otra, afecta de tal manera a su conducta, que es capaz de llevar a cabo una conducta u otra para cumplir el reto. 
Es por esto, que el profesor que tenga unas expectativas altas de sus alumnos (dentro de las posibilidades de estos), conseguirá que saquen lo mejor de ellos. Pero si por el contrario los profesores no esperan nada de sus alumnos, estos no harán todo lo que en realidad pueden hacer. Además, el profesor no transmite la misma seguridad si el mismo no la tiene en el, por eso cada profesor debe confiar en si mismo para que sus alumnos aprendan a confiar en ellos. 





                          VS.



















En estas dos imágenes las actitudes de los profesores tendrán una respuesta u otra sobre los alumnos. En la primera vemos como al haber respondido bien la niña a la suma, la profesora la refuerza con una sonrisa y una palmada, mientras que en la de abajo el profesor está retando a todos los alumnos a contestar algo en un determinado tiempo. ¿Qué desventaja puede tener esto? Hay alumnos que tienden a responder más rápido, pero otros necesitan más tiempo porque no lo saben o porque no tienen la suficientemente confianza cómo para decirlo. En la primera, los alumnos notarán la cercanía de la profesora y además tendrán un refuerzo positivo mientras que en la segunda a lo mejor el profesor simplemente responde si está bien o mal y con indiferencia.

Todo lo mencionado anteriormente son matices que influyen en la hora de aprender. El entorno, el profesor (padre/madre/profesor@) y sobre todo, la seguridad en sí mismo. 

Por lo tanto, diría que aprender es el proceso por el cual sabemos explicar un conocimiento nuevo (compartimos un conocimiento*) ya que lo conocemos y lo comprendemos, con total confianza para que otra persona pueda también adquirir ese conocimiento. Esta acción puede ocurrir tanto en la escuela como en la vida cotidiana ya que no todo se enseña en la escuela, como se cree. Y por esta razón, hay distintas maneras de aprender. En la escuela se dice que cuando apruebas es que has aprendido, con lo que no estoy de acuerdo porque memorizar** no es aprender ya que en un mes se olvida. Por eso, creo que cuantos más conocimientos se comprendan (de los que se enseñan en la escuela), más se aprende ya que se pueden poner en práctica. Por otro lado, en la vida cotidiana considero que la práctica es la mejor forma de aprender ya que como dije anteriormente, si te tropiezas nueve veces a la décima sabes que tienes que levantar más el pie. Por lo tanto, la experiencia nos permite conocer mejor ya que experimentamos la consecuencia. Es por eso además por lo que cuantas más veces experimentemos con el conocimiento que acabamos de adquirir, mejor se conocerá. Por ejemplo (ejemplo de clase), si nos acabamos de comprar un móvil nuevo y no sabemos utilizarlo, cuánto más lo utilicemos y descubramos de él, mejor aprenderemos a usarlo. 


*Todos los que poseemos conocimientos, podemos compartirlos pero no solo depende de quien está dando a entender ese conocimiento, sino que también depende de la persona quien lo está recibiendo, ya que si esta no siente ningún interés no se da el aprendizaje. Esto ocurre, como explicamos en clase, cuando en un grupo todos se implican en un trabajo y por lo tanto al compartir aprenden excepto una persona,que no tiene ningún interés por lo que se está tratando.

**Como he dicho antes, al memorizar se nos olvidan las cosas cuando pasa un tiempo, por lo tanto pienso que no es efectivo. Además, al aprender algo que no entiendes, no lo puedes poner en práctica. Es por esto que la aprendernos la teoría sin entenderla, no sirve para ponerla en practica. Como por ejemplo si aprendemos la teoría para sacarte el carnet de conducir pero no sabes manejar un coche, no tiene ningún sentido.